miércoles, 18 de enero de 2012

Propósitos

"¿De qué sirven los propósitos? si al fin y al cabo, aquellos que intentamos cumplir a principios de año se esfuman en la primera semana... además, por mucho que nos intentemos convencer de que algo nuevo va a suceder, al final ocurre siempre lo mismo."
No estoy de acuerdo.
Los propósitos al fin y al cabo no sólo son esas palabras banales que siempre coinciden con las del resto y entre las que se encuentra el término "reducción" como "reducción de nicotina en el cuerpo", "reducción de kilos", "reducción de gastos" o "reducción de mala leche", sino aquellos que nos ayudan a que, durante un año más, tengamos motivos por los que seguir viviendo y el principio de esos doce meses es solo un punto de información que nos lo recuerda.


Que un estudiante siga estudiando para alcanzar su meta o que un trabajador siga trabajando para mantener su vida son dos de los propósitos que más abundan y que además se cumplen en casi todos los casos, a no ser que ocurran varias situaciones: que el estudiante deje de estudiar por vagancia o por otros motivos externos o que el trabajador deje de trabajar por vagancia o por motivos económicos de la empresa.


En cualquier caso, no creo que haya gente que pida como propósito continuar en su puesto de trabajo sin dar palo al agua porque, si su propósito se acaba cumpliendo, no encontraría ninguna diferencia entre esa situación y la de robar.
Y aún no conozco a nadie que, en público, haya reconocido ese propósito.